Después de tres fechas y de dos derrotas consecutivas, Boca Juniors volvió a la victoria y fue con un categórico 4-0 sobre Newell’s Old Boys.
La Bombonera vacía fue escenario de un partido que se le hizo sencillo al equipo local, más por las debilidades de un rival completamente desdibujado que por sus propias cualidades pero en definitiva, el resultado significó para el vencedor un aire de impostergable resurección.
Daniel Díaz, Sebastián Palacios, Jonathan Calleri y Andrés Chávez, de penal, le dieron forma a la goleada de un equipo que contó con una buena producción del zaguero catamarqueño y al que el regreso de Cristian Erbes le dio el equilibrio que estaba faltándole.
Boca comenzó muy activo, con buena ciculación de pelota y en apenas cuatro minutos sacó ventaja, a través de un tiro libre desde unos veinte metros que Díaz ejecutó con violento derechazo, por el camino se desvió en el uruguayo Rodrigo Bentancur y el balón ingresó sobre la derecha de Luciano Pocrnjic.
El ímpetu inicial del equipo de Rodolfo Arruabarrena se prolongó por algunos minutos más y a los 8 minutos un remate de Bentancur, desde fuera del área, resultó levemente elevado.
Después experimentó Boca una baja de tensión y como Newell’s, más allá de algunas apariciones de Mauricio Tévez, Ezequiel Ponce e Ignacio Scocco, nunca encontró circuitos ofensivos, el juego fue haciéndose deslucido, intrascendente.
La última jugada de ataque digna de mención por parte de Boca fue un remate del chileno José Fuenzalida, desde el borde del área, que atrapó sin mayores inconvenientes Pocrnjic, a los 23.
En cuanto al equipo rosarino, lo mejor que produjo fueron dos disparos desde larga distancia, uno de Nicolás Castro que Agustín Orion desvió al córner sobre su palo derecho a los 10 minutos, y otro de Scocco, sorpresivo y muy bien ejecutado, que hizo dar la pelota en el palo derecho cuando el arquero no tenía posibilidades, a los 16.
A cuatro minutos de la reanudación Palacios recibió de Calleri, remató de media vuelta y el balón, después de un desvío en Víctor López, se metió junto al palo derecho de Pocrnjic dejando el encuentro definido.
Boca ni siquiera forzó el ritmo en ningún momento y a los 18, Nicolás Colazo ejecutó un tiro de esquina desde la izquierda y Calleri cabeceó muy cómodo para marcar el tercero.
A los 37 minutos Chávez aprovechó una mala salida, robó, cedió a Calleri y Nehuén Paz, desde atrás, cometió claro penal, del cual se sirvió el propio Chávez para cerrar el marcador.
Recién en los últimos cinco minutos Newell’s pisó con cierta agresividad el área del adversario, lo hizo dos veces a través de Scocco, en la primera ocasión su remate rebotó en su compañero Ponce y en la segunda contuvo Orion, que pocas veces pasó noventa minutos tan tranquilos.