Personal de la delegación municipal de la Ribera trabajó durante la jornada de hoy en el relleno de huecos y agujeros que pudieran servir para que se alojen o aniden las especies de ofidios no autóctonos que pudieran representar riesgos para los lugareños y visitantes. Personal de la dependencia, bajo las órdenes del delegado Matías Leyes, transportó a la zona grandes cantidades de tierra, con la que durante la jornada se taparon los sitios evaluados como propicios para el alojamiento de los animales.

La idea, según se explicó “Es evitar generar situaciones propicias para el ocultamiento, que nos impidan detectarlas, aislarlas y eventualmente dar a estos animales el destino y transporte a los sitios que la autoridad sanitaria disponga.”