La ciudad que no miramos: Frontispicios historias y personajes

Artículo de Noemí Blanco realizado dentro del Seminario Municipal «Avellaneda: su Arquitectura» a cargo de la Arq. MarÍa Descole de la Secretaría de Cultura, Educación y Promoción de las Artes de la Municipalidad de Avellaneda.
En la foto curioso detalle del avión y su piloto ubicado en la planta alta de Mitre 1041 y sector central de la fachada de la casa del Barquito en Mitre 939 de Avellaneda.

La convocatoria de hoy son los frontispicios de dos inmuebles de la Avenida Mitre. La casa ubicada en la Avda. Mitre 1041 es conocida como la «La Casa del Avioncito». Actual confitería Ibiza, perteneció a los padres del aviador Pedro Garré, un apasionado de su profesión. «En el año 1914 cuando se graduó y como parte de la celebración hizo acrobacias sobre la cancha de Racing, finalizando las mismas con un aterrizaje en el campo, donde acababan de jugar un partido el local contra Boca Juniors, los presentes sorprendidos tuvieron un espectáculo adicional». Con posterioridad, el Sr. Garré fue director de la escuela de aviación de Quilmes. (1)

Esta casa de dos plantas, con frente extenso, abarca más de un lote. La fachada está revestida en revoque símil piedra. En el primer piso tiene aberturas rectas que mantienen simetría hacia ambos lados. Los balcones poseen valiosas rejas artísticas. En el borde superior sobresale una gruesa cornisa en toda su extensión, en cuyo centro se ubica el bajo relieve con una avioneta, tan en detalle que en su interior se aprecia la figura del piloto.

La casa ubicada en la Avda. Mitre al 939, conocida como «La Casa del Barquito» actual Club de estudios y Zapatería Frida, «perteneció al doctor en biología Sr. Juan García que fue profesor y concejal» (2). Con frente revestido en símil piedra, de dos plantas, en la parte superior tiene ventanas de semiarco, con decoraciones artísticas. Contribuyen a la estética de la fachada las rejas de gran valor artesanal de los balcones. En el centro de las cornisas que corren en todo su largo, se ubica el bajo relieve con la figura de un barco. Debajo de éste sorprende un friso de mayólicas con dibujos de flores en colores turquesa y rosado.

Estas presencias señalan un interés explícito por hacer pública una demostración de honor representando con imágenes las cualidades de una persona o una historia. No se trata de simples adornos edilicios, son mucho más. En fin, el lector recorre la ciudad, la camina con aire curioso y buscando significados, descubrirá por sí mismo esta variedad de manifestaciones, donde muchas de ellas cantan claramente un modo de vivir o una historia de vida.

Referencias
(1) Cascante, Edgardo.» Barracas al Sud vida cotidiana 1870-1970″.pp 172 a 174(La aeronáutica deportiva al sur del Riachuelo)
(2) Referencia oral de Edgardo Cascante sobre la Casa del Barquito

Fotos SASA.

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