«En Avellaneda hay alrededor de quinientas propiedades intrusadas o en riesgo»
Lo aseguró a La Ciudad el ex Juez de Paz y actual responsable de la Oficina municipal para la Normalización de las Propiedades Ocupadas, Dr. Julio Battafarano. Una problemática que afecta a todas las localidades del Partido.
Desde este año, la Municipalidad de Avellaneda cuenta con una Oficina para la Normalización de las Propiedades Ocupadas, la cual tiene como objetivo evitar que nuevos inmuebles sean ocupados ilegalmente y asesorar a aquellos que fueron damnificados por tal situación.
La nueva dependencia, ubicada en el tercer piso de Güemes 835, está a cargo en forma Ad Honorem del ex Juez de Paz Letrado, Dr. Julio Battafarano, quien, durante una entrevista con diario La Ciudad, explicó que la oficina fue creada «por la crisis social» que implica la intrusión de una propiedad, ya que desde el punto de vista jurídico solo el damnificado puede iniciar acciones penales y civiles.
«Nosotros arrancamos hace cuatro meses, a partir de un censo voluntario que la Municipalidad había hecho hace algunos años – relató Battafarano – mediante el cual se invitó a aquellos vecinos que tenían casas intrusadas a acercarse para expresar su situación. En ese momento abarcaba cerca de ochenta propiedades».
Al respecto, el ex magistrado aclaró que «sabemos del problema de la falta de vivienda, pero tampoco es justo que afecten la propiedad de otros vecinos» y deferenció los casos de «una propiedad que está abandonada hace tiempo de otra que, cuando se le pone un cartel de alquiler o venta, a la noche se le meta gente», graficó.
Por iniciativa del intendente Jorge Ferraresi, esta oficina empezó el año trabajando en un relevamiento de dos zonas conflictivas, como lo son el sector de las barracas y el de la intersección de las avenidas Mitre e Hipólito Yrigoyen.
En la primera de las zonas, que abarca el perímetro formado por Ameghino, 12 de Octubre, Avenida Roca y Estévez, se detectaron cuarenta propiedades ocupadas y otras ochenta en situación de riesgo, es decir, posibles lugares para nuevas intrusiones. «Sabíamos que esto era así por la inacción, desde hace muchos años, de las barracas», sostuvo el Dr. Battafarano.
Por otra parte, en el sector ubicado entre Mitre, Italia, Díaz Vélez e Yrigoyen, la estadística marca que hay más muchas más propiedades intrusadas, entre cincuenta y sesenta, contra apenas veinte que están en riesgo.
«En la zona de Pavón (actual Yrigoyen) y Mitre está casi todo tomado, mientras que en todo Avellaneda, entre intrusadas y en riesgo, tenemos alrededor de quinientas», aseguró el responsable de la Oficina para la Normalización de las Propiedades Ocupadas de la comuna.
Con respecto a la tarea específica que aborda el municipio en relación a las casas tomadas, el Dr. Battafarano aseguró que, como no puede litigar porque no son los directos damnificados, se encarga de brindar asesoramiento y colaborar con sus abogados «para que las causas no se duerman».
«Vamos a tratar de acelerar las causas, trabajando con los fiscales y los jueces. Lamentablemente la Justicia suele ser lenta, por eso nuestra tarea será estar encima de las causas con nuestros abogados», remarcó Battafarano.
«Nosotros acá podemos orientar, pero la acción penal por la usurpación se hace en el Polo Judicial, acreditando la propiedad en la fiscalía de turno. Después el Juez de Garantías ordena el desalojo».
Por otro lado, para evitar nuevas intrusiones, la Oficina que encabeza el ex Juez de Paz intenta buscar a los propietarios para establecer pautas que impidan nuevos conflictos.
«Hay muchos galpones con grandes deudas al municipio, las cuales se podrían compensar para que la Municipalidad sea propietaria y así destinar el espacio a utilidad pública – explicó – o ver si pueden poner una custodia para que no haya intrusiones, que es lo que genera mucho más conflicto».
Finalmente, el Dr. Julio Battafarano recomendó no actuar por la fuerza, aunque uno sea el legítimo propietario porque eso traería aparejado nuevos inconvenientes.
«Lamentablemente se han montado organizaciones con este tema, que hacen una especie de seguimiento de posibles propiedades a tomar, las ocupan y luego les alquilan habitaciones a varias familias – aseguró – no siempre es una necesidad de una familia sin techo, muchas veces es un negocio», reveló.
Por último, en cuanto a los tiempos que lleva la liberación de una propiedad intrusada, Battafarano sostuvo que «es difícil hablar de plazos en la Justicia, lo importante es la voluntad política del intendente de poner en funcionamiento esta oficina a efectos de evitar el conflicto social que se genera después de una usurpación», concluyó el Dr. Julio Battafarano.