Durante la concurrida ceremonia, fue entregada a la institución local la Medalla de Honor de la Emigración, Categoría Oro, que otorga el Ministerio español. Miras Portugal estuvo acompañado por el consejero de Trabajo y Asuntos Sociales de la Embajada de España, Santiago Camba; el cónsul adjunto, Marcos Rodríguez; el delegado del gobierno gallego en Argentina y Uruguay, Alejandro López Dobarro y el presidente del Centro Gallego de Avellaneda, Juan Rodríguez.
El propio Miras Portugal fue el encargado de hacer entrega de la Medalla de Oro, la cual fue recibida por Marta Paredes – nieta de Antonio Paredes Rey, uno de los fundadores del Centro – y Francisco López Conchado, expresidente de la entidad.
A la hora de los discursos, el director general de Migraciones, Aurelio Miras Portugal, expresó: “Si algo profundo hemos tenido en nuestra historia es que nos hemos identificado a donde hemos ido, sin dejar de ser quienes éramos, y en ningún lugar hemos creado ninguna tensión ni problema”.
“Nosotros somos el primer pueblo globalizador de la historia. Donde hemos ido hemos creado nuestros centros y los hemos dado para que se abran a la cultura de los lugares donde íbamos”, señaló el funcionario español. “Nosotros somos ese pueblo que ha creado antes que nadie la sociedad de beneficencia y posteriormente la sociedad de socorros mutuos, hemos aprendido que hay algo que se llama filantropía y el que tenía ayudaba al que necesitaba”, destacó.
Por su parte el presidente del Centro Gallego de Avellaneda, Juan Rodríguez, expresó: “Hoy es un día memorable e incomparable para el Centro Gallego de Avellaneda, para quienes en este momento somos sus representantes, para sus socios y amigos y también para el pueblo de Avellaneda, en ese tiempo Barracas al Sud, donde se fundó y donde transcurrieron 115 años de su historia”.
“Nos sentimos sumamente orgullosos de este largo y fructífero recorrido, sin prisa pero sin pausa, con Galicia, con España, y con este país que nos cobija, que es la tierra de nuestros hijos y nietos. Ellos están obligados a proseguir esta loable tarea, ahora premiada con esta Medalla de Honor a la Emigración”, concluyó Rodríguez emocionado.
Para finalizar la ceremonia, el cuerpo de baile y de gaitas del centro Gallego de Avellaneda ofreció un espectáculo de danzas tradicionales gallegas.
También estuvieron presentes en el acto, que tuvo lugar en el salón de fiestas de la institución, ubicado en la Avenida Mitre 780 del centro de nuestra ciudad, el Obispo de Avellaneda y Lanús, Monseñor Rubén Oscar Frassia; el ex intendente de Avellaneda, Luis Sagol; representantes de la Asociación de empresarios gallegos de Argentina; el diputado con mandato cumplido y expresidente del Consejo General de la Emigración, José Castelao Bragaña; el Defensor del Pueblo de Avellaneda, Dr. Sebastián Vinagre, representantes de bomberos voluntarios de nuestra ciudad y vecinos invitados.

Centro Gallego de Avellaneda
Un grupo de residentes de origen gallego fundaron el Centro Gallego de Avellaneda, el 22 de octubre de 1899.
Al año siguiente comenzó a funcionar en la entidad la Escuela de Música, con la creación de un conjunto musical, el cuerpo de baile y un coro.
En el año 1905 la entidad compró un terreno en pleno centro de Avellaneda donde se comenzó a edificar su sede social, finalmente inaugurada en el año 1915.
El Centro cuenta con un salón de fiestas y reuniones, bar, biblioteca, sala de música y vídeo, una hemeroteca.
La asociación, además, dispone de un balneario y campo de recreo, de 6 mil metros cuadrados, en los que se celebran festivales y romerías.