El Centro Gallego de Avellaneda celebró sus 115 años de vida

Hubo una muestra de artistas plásticos locales; la elección y coronación de la reina; una Misa recordatoria celebrada en la Catedral, con música de gaiteros, y un gran xantar realizado en la sede de Avenida Mitre al 700.

El Centro Gallego de Avellaneda, institución que agrupa a una de las colectividades más antiguas y tradicionales de nuestra ciudad, celebró la semana pasada sus 115 años de vida.

El programa de festejos comenzó el lunes con la inauguración de una muestra de pinturas de los artistas plásticos locales Araceli Scian, Emilio Acosta, Nora Carmen Sollosqui y Mónica Lynch, quienes expusieron sus obras en el salón de actos de la sede social de la institución, ubicada en la Avenida Mitre 780 del centro de nuestra ciudad.

Durante la celebración, la joven Florencia Prósperi, de 18 años de edad, fue elegida y coronada como la reina del Centro Gallego de Avellaneda, por el período de un año.
En esa misma velada, fue presentado el cuerpo estable de baile y los gaiteros del Centro Gallego, quienes amenizaron el encuentro con sus típicas y tradicionales danzas e interpretaciones musicales.

Los festejos continuaron el día miércoles, fecha del aniversario de la institución, en la que fue celebrada una Misa recordatoria en la Catedral local, oficiada por el Padre Leonardo Chimento, quien invitó a los integrantes de la Comisión Directiva del Centro Gallego a que se acerquen al altar y ofrecerles su bendición.

Al culminar la ceremonia, y aún dentro del templo, los gaiteros deleitaron a los presentes con sus interpretaciones de folklore gallego, dirigidos por el maestro Santiago Molina.

Más tarde, en el salón de actos de la sede, fue ofrecida una recepción por los integrantes de la Comisión Directiva del Centro Gallego, autoridades de diversas instituciones gallegas, socios e invitados especiales.

Allí, el presidente de la entidad gallega local, Juan Rodríguez, expresó: “Hoy tenemos aquí instituciones que ya cumplieron un siglo y otras que están por cumplirlo, lo que me lleva a pensar que son muchos años de actividad y de mucha gente que trabajó y trabaja para que nuestras costumbres, idioma, folklore, gastronomía y otras cosas pervivan para nuestros hijos y nietos, y para los que gustan de nuestra música, nuestros bailes y del sabor de una empanada o de un “Polbo a Feira (pulpo a la gallega)”.

“Muchos tienen más experiencia que yo, y siguen con todas las ganas y la fuerza para que esta inmensa e inolvidable obra de la emigración gallega en todo el mundo siga firme en ese rumbo que le imprimieron nuestros ancestros fundadores, y que nosotros debemos cuidar”, señaló Rodríguez.

“Mi mayor deseo es que tanto el Centro Gallego de Avellaneda como todas las instituciones que integran la colectividad gallega sigan con ese amor que tenemos por Galicia, y por este país en que vivimos, Argentina”, concluyó emocionado.

Los festejos culminaron el domingo 26 con un gran xantar (almuerzo), en la sede de la Avenida Mitre al 700, al que asistieron socios, representantes de diversas instituciones e invitados especiales.

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