En una recorrida por los lugares, Télam ingresó al Bingo Congreso, cuyas luces permanecían apagadas, el salón de juego lucía pulcro, ya sin rastros de actividad social.

Mientras los clientes golpeaban la puerta en respuesta de cuándo volverían a abrir, el empleado administrativo Juan Llanos contó que en el Bingo Congreso “trabajaban cien personas”, convencidas de que iba a haber una “solución consensuada” aunque se hubiera vencido la licencia.

“Pudimos subsistir un mes más por una cautelar, pero hoy a la tarde vino Lotería Nacional y lo cerró”, se lamentó el empleado.

Llanos dijo que “la discusión ahora es quién se va a hacer cargo de la indemnización, porque aparentemente la empresa está presentando quiebra y Lotería Nacional, que es solidariamente responsable, debería hacerse cargo pero no emitió opinión al respecto”.

“Los trabajadores no tenemos manera de saber quién se va a hacer cargo de lo que nos corresponde: lo único que sabemos, es que dejaron a cien familias ‘en pelota'”, se quejó.

Un representante sindical dijo que “entre los cinco bingos hay 500 trabajadores, incluyendo los de juegos de azar y los gastronómicos”.

“Lo único que se puede discutir, con la situación consumada, son las indemnizaciones, porque las empresas no pueden funcionar sin las licencias y claramente Lotería no está dispuesto a renovarlas”, sostuvo.

Frente al Bingo Caballito, unos 70 trabajadores cortaban la calle en Rosario y Del Barco Centenera, con la sala todavía abierta y con luces prendidas, sin jugadores y con restos de cartones en las mesas.

Un delegado dijo a Télam: “Estamos esperando que la empresa y Lotería resuelvan cómo cubren las indemnizaciones, porque hasta ahora sólo aparecieron para la clausura y nos dejaron sin ninguna información sobre cómo seguir con nuestras vidas”.

En el Bingo Lavalle, dónde trabajaban más de 120 personas, esta tarde sólo quedaban algunos de los delegados en la sala cerrada, esperando novedades acerca de las indemnizaciones. Una de ellas, Bety, dijo a Télam que “la empresa estuvo todo el año pasado tratando de solucionar este problema, pero como el gobierno nacional y el de la ciudad no se pusieron de acuerdo se quedaron sin licencia y ahí nos quedamos sin futuro”.

“Los directivos de la empresa le transmitieron a algunos compañeros que no se quieren borrar y quieren una salida digna para todos, pero eso también depende de que Lotería Nacional les facilite los acuerdos necesarios”, agregó.