Representantes de la Cámara de Supermercados de Córdoba aseguraron esta noche que, si continúa el bloqueo que lleva adelante el Sindicato de Camioneros de esa provincia en cuatro cadenas de supermercados, algunos productos comenzarán a faltar en las góndolas desde mañana.

“Seguramente, a partir de mañana, comenzará a haber faltante de algunos productos. A ello hay que sumar el problema de los productos perecederos, como el pescado, en fechas como esta (Semana Santa)”, aseguró esta tarde a la prensa el vicepresidente de la cámara, Benjamín Blanch.

El dirigente precisó que el bloqueo, al frente del cual se puso esta mañana Pablo Moyano, afecta a “los depósitos centrales de las cuatro cadenas regionales, todas de capitales cordobeses”.

“La mayoría de los súper de estas cuatro cadenas son locales chicos que, por ende, se abastecen a diario de los depósitos centrales, que son los que están bloqueados”, se quejó Blanch.

Asimismo, el dirigente manifestó: “no podemos ser rehenes ni víctimas de un conflicto intersindical. Nosotros no redactamos las leyes, simplemente nos ajustamos a los regímenes legales vigentes”.

Blanch destacó que, si bien el Sindicato de Camioneros pretende que pertenezcan a ese gremio 300 trabajadores de los depósitos de los cuatro supermercados, “el Ministerio de Trabajo de la Nación dejó en claro que son empleados de comercio, porque los súper son firmas comerciales, que no hacen logística: sólo abastecen a sus propios locales”.

Horas antes, el titular de la misma cámara, Ricardo Brasca, había manifestado que formularon una denuncia penal y que esperan una pronta solución, “teniendo en cuenta que, en la Semana Santa, las cámaras refrigerantes (de los supermercados) están abarrotadas de pescado y de mercadería perecedera que tendría que tirarse si no se consume hasta el miércoles”.

Por su parte, Moyano, quien viajó a Córdoba a encabezar el bloqueo, advirtió: “Naturalmente, no habrá mercadería, puede haber desabastecimiento, pero hoy hay 300 trabajadores que están siendo `desabastecidos` porque cobran entre 2.000 y 3.000 pesos menos”.

La medida, a partir de la toma del centro de distribución que la firma supermercadista Cordiez posee en la avenida La Voz del Interior, camino al aeropuerto de la ciudad de Córdoba, también afecta a los supermercados Mariano Max, Almacor y Buenos Días, en los que se desempeñan 3.500 trabajadores.

El conflicto entre los camioneros y los supermercadistas recrudeció luego de que un laudo del Ministerio de Trabajo de la Nación dispuso que los transportistas que cumplen tareas en los supermercados pertenecen a la actividad comercial y, por lo tanto, el sindicato al que deben pertenecer es el de la Asociación de Empleados de Comercio (Agec) encuadrados dentro del Convenio Colectivo de Trabajo 130/75, y no al Sindicato de Camioneros.

Mientras tanto, los representantes del gremio no permiten el ingreso o egreso de mercadería de ese centro distribuidor, en reclamo para que se pase a ese sindicato a un núcleo de trabajadores que hoy están en el convenio de Empleados de Comercio y que forman parte de la carga y descarga de productos.

Moyano, secretario adjunto del Sindicato de Camioneros, dijo en el lugar que “hace unos meses, el Sindicato de Camioneros de Córdoba firmó un acuerdo de traspaso de cuatro o cinco supermercados, que alcanza a 300 trabajadores de la parte de logística y el traspaso debía ser a partir del 1 de diciembre”.

“Formulamos denuncia ante los ministerios de Trabajo de la Nación y de Córdoba, y ante la Justicia Penal para hacerlos responsables por los perjuicios que nos están ocasionando, pero hacen caso omiso a todo”, replicó Brasca, quien agregó que ya los notificaron del laudo del Ministerio de Trabajo de la Nación.

Los supermercadistas insistieron en que no tienen “un Plan B si el gobierno provincial y la Justicia no brindan una respuesta urgente” para destrabar el bloqueo que afecta a las cuatro cadenas de supermercados