No hubo acuerdo en el Ministerio de Trabajo y sigue el lock out patronal al trasporte

Los choferes de ómnibus de larga distancia agrupados en la Unión Tranviarios Automotor (UTA) y la cámara empresaria (CELADI) no alcanzaron un acuerdo en el Ministerio de Trabajo, a pesar de haber negociado durante casi diez horas.

En ese marco, el titular de la CELADI (Cámara de Empresarios de Transporte de Larga Distancia), Mario Verdaguer, aseguró hoy que “el paro continúa” y reclamó “ayuda económica” para la actividad.

“Llámenlo subsidio o cómo quieran”, señaló Verdaguer en la cartera laboral, en un aparte del encuentro convocado para intentar destrabar el grave conflicto, que impide desde hace cinco días la salida de ómnibus de larga distancia desde las terminales.

El empresario negó un pacto con los sindicalistas de la UTA para continuar la protesta, no obstante la decisión del gobierno de otorgar un aumento salarial del 23 por ciento para el sector.

Además, Verdaguer aseguró que de no atenderse los reclamos empresarios podrían producirse cinco o seis mil despidos.

Por su parte, el interventor de la Comisión Nacional de Regulación del Transporte (CNRT), Ariel Franetovich, aseguró que el conflicto dejó de ser un paro para convertirse en “un lock out” y añadió que se trata de “una extorsión que toma de rehén a la gente”, además de considerar que las empresas deberían recibir “la máxima sanción, es decir, la caducidad de los permisos”.

“Es difícil salir de esta situación de un día para el otro. El viernes, a última hora, se agotó la vía administrativa y se dispuso un 23 por ciento de aumento desde Trabajo, por lo que el conflicto dejó de ser un paro para convertirse en lock out”, dijo.

Franetovich aseveró que las empresas procuran de todas las formas “infiltrarse” en el sindicato y en organismos del Estado y expresó que la CNRT está realizando constataciones para producir multas y sanciones, para luego proponer la caducidad de los permisos.

“Estos empresarios no toman conciencia de lo que es un servicio público y de las características que debe tener, como la permanencia y habitualidad. Hay que desmonopolizar”, concluyó.

El ministro de Trabajo, Carlos Tomada, cuestionó hoy la medida de fuerza y consideró “una irresponsabilidad” gremial y patronal “el planteo de regreso a la política de subsidios” para el sector.

“El gobierno continúa apostando al diálogo para destrabar el conflicto. El conflicto dejó de ser un reclamo de negociación colectiva por un aumento salarial para convertirse en una clara presión para que la actividad regrese a los sistemas de subisidios generalizados, lo que es un tema definitivamente concluido”, dijo.

Tomada juzgó “intolerable” la situación generada y advirtió que de continuar el paro habrá que adoptar medidas “muy duras y extremas”, como sanciones económicas y el reclamo a la justicia de cese o suspensión de la personería gremial de la UTA, así como en el caso de las empresas de transporte cancelar la concesión”.

“Es una vergüenza tener de rehenes a cientos de miles de ciudadanos por un conflicto que no se relaciona en nada con la negociación colectiva por una mejora salarial”, concluyó Tomada.

Una unidad sanitaria móvil con médicos y equipada con consultorios y medicamentos fue dispuesta este mediodía en la terminal de Retiro para atender a las personas afectadas por el paro de conductores de ómnibus de larga distancia que requieran asistencia y eventuales derivaciones hacia centros de salud.

La medida fue dispuesta por el ministro de Salud, Juan Manzur, quien ordenó que un móvil del Programa de Abordaje Sanitario Territorial (PAST) se instale en Retiro para ofrecer respuestas a las necesidades sanitarias de las personas que, desde hace cinco días, están impedidas de trasladarse hacia distintos lugares.

En el encuentro de hoy en las dependencias laborales de la Avenida Leandro N. Alem al 600 participaron la viceministra de Trabajo, Noemí Rial, y el secretario de Transporte, Alejandro Ramos, quienes procuraron un acuerdo entre las partes.

La Secretaría de Transporte, precisamente, solicitó a los usuarios que no concurran a las terminales de ómnibus de larga distancia a partir de la continuidad de las medidas de fuerza.

Un comunicado de Transporte solicitó a los pasajeros con boletos adquiridos para los próximos días que no concurran a las terminales ya que, como consecuencia del “lock out de las empresas de transporte y la UTA los servicios no están funcionando”.

También solicitó que “se abstengan de comprar boletos hasta que se anuncie formalmente el levantamiento del paro”.

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