El vicegobernador de la provincia de Buenos Aires, Gabriel Mariotto, expuso el viernes último sobre la vida del Padre Mugica, ante cientos de militantes que colmaron el hall central de la Universidad Nacional de Avellaneda.

Invitado por la presidenta del Instituto de Estrategia y Desarrollo Jauretche Avellaneda, Mónica Litza y acompañado por el intendente Jorge Ferraresi y el rector de la UNDAV Jorge Calzoni, el Vicegobernador bonaerense tuvo a su cargo la segunda clase magistral de la Cátedra «Arturo Jauretche de Análisis y Proyección del Nuevo Pensamiento Nacional».

«Es un gran orgullo y un enorme placer volver estar en esta Universidad de Avellaneda, a la que amamos, y presentar a nuestro Vicegobernador Gabriel Mariotto», expresó Mónica Litza, quien agradeció al rector Jorge Calzoni y al intendente Ferraresi «por el acompañamiento militante a cada uno de los proyectos que iniciamos».

«Cuando pensamos en quién tenía que hablar sobre la figura del Padre Mugica, no lo dudamos ni un momento. Porque vos, al igual que Néstor y Cristina, tampoco dejaste tus convicciones en la puerta. No casualmente elegiste el nombre Padre Mugica para tu agrupación, ni realizaste un documental sobre su vida y su obra, y ahora seguís llevando bien arriba su bandera», expresó la funcionaria nacional avellanedense, dirigiéndose al Vicegobernador. «La bandera de ese magisterio profundamente humanista y cristiano que abrazó Mugica: el peronismo y la opción por los pobres. Hoy, con la fuerza de nuestra Presidenta en esta Argentina igualitaria y de inclusión social, podemos sentir que Mugica está más vivo que nunca en cada una de las acciones de nuestro gobierno», concluyó Litza.

A su turno, Mariotto evocó con conocimientos y admiración la figura de Carlos Francisco Sergio Mugica Echagüe, más conocido como el Padre Mugica, un sacerdote de los llamados «tercermundistas» en las décadas del ’60 y ‘70, que abrazó al peronismo y a las luchas populares en la Argentina, y que fue asesinado el 11 de mayo de 1974.

Director de un excelente documental titulado «Padre Mugica», en el año 1999, Mariotto llamó a «recuperar el compromiso y la coherencia» del sacerdote, quien «dio la vida por el Evangelio, lo más parecido al peronismo que encontró», según graficó.

La organización de los vecinos en la Villa 31; su pasión por el Racing Club; la popularidad y presencia en los medios de comunicación para difundir su prédica; su encuentro con Juan Domingo Perón, quien lo visitó antes de su regreso definitivo al país, en 1972; y su trágico asesinato en 11 de mayo de 1974, «la primera muerte de la Triple A», fueron algunos de los tópicos de la vida del sacerdote relatados con emoción por Mariotto, ante la ovación de la militancia.