Malestar en intendentes del PJ por las obras públicas inconclusas

La indignación pública por los millones de López abarcó a todos los jefes comunales peronistas más allá de su posicionamiento político actual respecto al kirchnerismo, pero puertas adentro crece la bronca con Julio de Vido, quien fue el hombre nexo entre los intendentes y el gobierno nacional durante los 12 años del kirchnerismo y que digitaba con premios y castigos los recursos de Nación a través del programa “Más Cerca: Más Municipio”.

Un fuerte rol en cada negociación de obras para los municipios tuvo la Federación Argentina de Municipios (FAM) conducida por el intendente de Florencio Varela, Julio Pereyra, quien al conocerse la detención de López publicó un mensaje en redes sociales en el que se preguntó: “¿Cuántas obras podríamos haber concluido? ¿Cuántas obras que ahora siguen inconclusas?”.

De Vido, quien reconoció que López era ‘su mano derecha’, fue el único ex funcionario nacional que tras al derrota electoral del año pasado se reunió a puertas cerradas con los intendentes en la sede del Frente Nacional Peronista, con el único objetivo de hablar sobre el futuro de las obras.

Otra de las que lamentó la realización de más obras con el dinero que encontraron al ex secretario fue la intendenta de La Matanza, Verónica Magario, que se despachó: “Da asco ver todo ese dinero mientras nosotros -los jefes comunales- estamos luchando por un poco de recurso para realizar las obras que necesitan los vecinos”, al participar de un acto en la sede porteña del PJ nacional.

Uno de los líderes municipales de un distrito cercano a La Matanza se animó a profundizar su bronca y lanzó en ese mismo evento: “Nosotros tenemos que poner la cara con los vecinos. Ahora cómo le explicamos que no se pudo hacer esta o aquella obra si en la televisión ven que hay millones de dólares que no se sabe de donde salieron”.

Sin dudas, el malestar crece en aquellos intendentes que estuvieron muy cerca del ex ministro de Planificación e integraron el extinguido grupo de ‘Los Oktubres’ que era respaldado por De Vido y estaba integrado por los entonces jefes comunales Patricio Mussi (Berazategui), Juan Pablo Angeleri (General Rodríguez), Juan Pablo de Jesús (Partido de la Costa), Francisco Durañona (San Antonio de Areco), Eduardo “Bali” Bucca (Bolivar), Francisco Echarren (Castelli), Hernán Yzurieta (Punta Indio) y Santiago Magiotti (Navarro).

Pero la zona más caliente para el hombre sindicado como del riñón del ex presidente Néstor Kirchner, son los distritos que ahora están conducidos por los intendentes justicialistas que tienen una estrecha relación con el Pro.

Así lo demuestra el número dos del lomense Martín Insaurralde, Alberto Carasatorre -lo reemplazó en el Municipio cuando Insaurralde fue diputado nacional- quien confesó lo que es un secreto a voces para el resto de los jefes comunales: “Yo hablé con López. Traté con él obras para Lomas”.

En medios locales, Carasatorre: “Le dije a López que cagaba a vecinos de Lomas y me sonrió como no importándole nada. Tuve un contacto muy feo con él (López) porque me pelee y discutí mucho”.

“Me habían escrito todas las obras que iban a hacer para Lomas. A partir de ahí decidí dejar de tener trato con él porque vi que lo que nosotros creíamos prioritario para Lomas, no lo era para él, y comencé a desconocer su figura”, remató.

También graficó el panorama en los municipios respecto a la situación de la obra pública al que calificó de “nefasto” porque “las obras estaban paradas porque los recursos no llegaban”.

En este marco de supuesta corrupción que “mancha a todo el peronismo” que fue parte del gobierno anterior, como lo afirma Pereyra, los intendentes del PJ primero se expresaron públicamente para distanciarse de López y luego se llamaron a silencio, aunque la mayoría quiere que la justicia actué rápido para que no los salpiquen a ellos.

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