La Oficina Anticorrupción (OA) pidió a la Justicia Federal el embargo del domicilio particular del ex ministro de Planificación Federal de la gestión kirchnerista, Julio de Vido, y de todos los bienes que se encuentren dentro de esa propiedad, ubicada en la localidad bonaerense de Zárate.

Así lo solicitó en el marco de una presentación que realizó ante el juez Claudio Bonadio en el marco del expediente en el que hace poco más de un mes, el ex funcionario y actual diputado nacional por el Frente para la Victoria fue procesado por su responsabilidad en la tragedia de Once.

La propia Oficina Anticorrrupción, encabezada por Laura Alonso, difundió este viernes la presentación realizada en los Tribunales Federales de Comodoro Py, un día después de haberle pedido al mismo magistrado que determine si el dinero incautado al detenido ex funcionario José López puede tener vinculación con quien fue su superior en el Ministerio de Planificación Federal, para tomar parte de ese dinero en el embargo por 600 millones de pesos dispuesto por la Justicia en la causa por la tragedia de Once.

Este viernes, en cambio, la OA -querellante en la causa que investiga responsabilidades en la tragedia de Once según lo ordenado por el Tribunal Oral Federal número 2 tras el veredicto de diciembre último- solicitó al juez Bonadio el embargo del domicilio particular de De Vido, localizado en el Club de Chacras “Puerto Panal”, en la localidad de Zárate, como así también de “los bienes que se encuentren dentro de esta propiedad”.

“Solicitamos se libre mandamiento de embargo a los efectos que el Oficial de Justicia se constituya en el domicilio indicado y proceda a embargar la totalidad de los bienes no registrables de cualquier naturaleza que se hallen en el mismo (que no sean inembargables en virtud de prescripción legal), se los afecte a la medida cautelar dispuesta en autos y se designe depositario judicial”, sostuvo el organismo encabezado por Laura Alonso en el escrito presentado hoy ante Bonadio.

Al realizar el pedido, la Oficina Anticorrupción destacó la necesidad de “evitar que el embargo se transforme en una medida puramente formal”.