Los principales referentes del bloque kirchnerista ya adelantaron que mantendrán su dictamen de mayoría sin alterarle el texto, por lo que consideran que sería en vano una nueva reunión de la comisión.

La mayoría de la bancada del FpV decidió avanzar con el pedido de sesión especial basándose en cuestiones reglamentarias y en antecedentes legislativos que indican que el plenario puede retomar el debate con mayoría simple y sin que se expida la comisión.

El antecedente más fehaciente se remonta a 1986, cuando el entonces presidente de la Cámara, Juan Carlos Pugliese (UCR), autorizó que un proyecto de reforma del IVA se volviera a discutir sin que la comisión, a la que había sido enviado el texto, se expidiera sobre el mismo.

“No es necesario que se reúna la comisión porque el proyecto ya tiene dictamen y ese dictamen sigue vigente, no se cayó. Por eso, vamos a insistir este miércoles en el tratamiento del Presupuesto en el recinto”, aseguró a Télam la diputada María Teresa García, secretaria parlamentaria del bloque oficialista.

La oposición, en tanto, se divide nuevamente entra quienes señalan que darán quórum para sesionar y quienes niegan esa posibilidad; los que dicen que votarán a favor y los que anticipan que lo harán en contra; además de los que afirman que es obligatorio que el tema vuelva a pasar por la comisión de Presupuesto y Hacienda.

El radicalismo, principal bloque de oposición en el heterogéneo `Grupo A`, aún no definió qué posición adoptará; mientras que el PRO no decidió todavía si seguirá en pleno la recomendación de su líder partidario, Mauricio Macri, de apoyar la aprobación del proyecto enviado por el Poder Ejecutivo.

Desde Proyecto Sur, Claudio Lozano, dijo que “no convocar a la comisión de Presupuesto y Hacienda implicaría dejar en claro que el oficialismo lo que pretende es no tener presupuesto alguno y que su único objetivo es victimizarse y trabajar tranquilamente con la prórroga del presupuesto 2010”.

El miércoles pasado no se llegó a votar el proyecto porque varios diputados se negaron a afrontar esa instancia “ante la falta de consensos”, lo que motivo que finalmente se decidiera la vuelta a comisión del proyecto, tras fracasar la moción de que se pasara a un cuarto intermedio por siete días.

Las divergentes posturas de integrantes del `Grupo A` sobre dar quórum o no, apoyar o rechazar el proyecto oficialista o ausentarse del recinto durante la votación, motivaron controversias internas y acusaciones cruzadas entre diferentes bancadas de ese sector.

En ese marco, la titular de la Coalición Cívica (CC), Elisa Carrió, cuestionó a la UCR “por haber colaborado con el oficialismo con el quórum”, y denunció la supuesta “compra” de voluntades para facilitar el número.

Esto derivó en la convocatoria a la comisión de Asuntos Constitucionales, que preside Graciela Camaño (Bloque Peronista), para el martes a las 10, con el objetivo de tratar las denuncias sobre supuestas maniobras para que algunos diputados cambiaran el sentido de sus votos o se ausentaran de la sesión.

A esa reunión están invitadas, además de Carrió, las diputadas Cynthia Hotton (Valores para mi País) y Elsa Alvarez (UCR), quienes también formularon denuncias en ese sentido en el recinto.

En el pedido de sesión especial para el miércoles, el oficialismo incluyó también en el temario una modificación de la ley de quiebras y un proyecto para modificar el régimen de empleadas de casas particulares, entre otras cuestiones.