“No tiene nada que cambiar porque es lo mismo que venía planteándose desde el primer momento y que seguramente puede ser revisado por la Presidenta tantas veces como crea conveniente”, dijo el funcionario, pero aclaró: “Bajo ningún punto de vista tiene cosas por revisar inmediatas y que sean reemplazables”.

En ese sentido, enumeró algunas de las medidas tomadas como “la democratización de medios, la necesidad imperiosa de sostener este marco de la economía heterodoxa por momentos, del crecimiento de acumulación de reservas, del aumento de la recaudación, del respeto por la palabra empeñada en derechos humanos”.

También subrayó “el acompañamiento a nuestros jubilados y pensionados que han sido el desvelo de nuestra Presidenta” y “otros elementos que tienen que ver con la obra pública y la generación de trabajo”.

“Lo que ella hizo es una definición estratégica de lo ya fue planteado y definido como gestión de gobierno y no tiene porqué cambiar”, completó Fernández.

Consultado por opiniones de sectores de la oposición sobre la posibilidad de cambios, el ministro dijo que “hemos obtenido resultados altamente positivos con muchas de esas políticas definidas por la Presidenta y no veo por qué tenemos que estar cambiándolas”.

En referencia a quienes, tras la muerte de Néstor Kirchner plantearon sus deseos de que Cristina Fernández busque la reelección en 2011, el jefe de Gabinete afirmó que “no es el momento oportuno” para hablar de candidaturas.

“Una cosa es lo que es la expresión de la voluntad y las aspiraciones personales que todos podemos tener y otra cosa es el momento oportuno para poder llevar a la práctica ese análisis”, consideró en declaraciones a FM Milenium.

Acerca del titular de la CGT, Hugo Moyano, y el espacio que ocupa, Fernández manifestó que a la Presidenta “no puede preocuparle “ese espacio” porque “la columna vertebral del partido justicialista es el movimiento obrero organizado” y “nadie reniega de esa situación”.

“Es muy importante la tarea del movimiento obrero y este gobierno dejó de tener un salario mínimo vital y movil de 300 pesos por muchos años para ponerlo en cerca de 2 mil pesos, restauró las convenciones colectivas de trabajo y vamos a defender cada uno de esos puntos”.

Con relación a la reunión que la Presidenta mantuvo ayer en Casa de Gobierno con el gobernador bonaerense Daniel Scioli, Fernández sostuvo que “su presencia es constante, siempre lo ha sido y nunca ha llamado la atención”.

Al referirse al mensaje que anoche la Presidenta dirigió por cadena nacional, dijo que distinguir entre dificultad y dolor “es una diferenciación gráfica contundente de lo que significa ser presidente de todos los argentinos y su situación personal”.

“Su situación personal nada tiene que ver con sus responsabilidades como Presidenta y a lo que se tiene que abocar y está dispuesta a hacerlo”, destacó.