El ministro de Justicia de la provincia de Buenos Aires, Gustavo Ferrari, confirmó hoy que existieron “tres llamados amenazantes” contra la gobernadora de la provincia de Buenos Aires, María Eugenia Vidal, y que además “le dejaron un cartucho de escopeta en el garaje de la vivienda” en la que residía antes de ocupar el cargo.

Ferrari consideró que se trata de “hechos claros, precisos y concordantes vinculados a la decisión política de la gobernadora de luchar contra la corrupción y el narcotráfico en todos los sectores”.

El funcionario manifestó en radio La Red que “hubo tres llamados amenazantes, uno alrededor de las 21, el otro a las 22 y el último a las 23. Y un hecho trascendente es que apareció un cartucho de escopeta sin percutar en el garage de la vivienda de María Eugenia Vidal, que ya no utiliza”.

Agregó que se trata de “vicios claros, precisos y concordantes” y enumeró “la intimidación al ministro (de Gobierno, Federico) Salvai”, cuando en junio pasado desconocidos ingresaron a su vivienda en La Plata; “las personas que ingresaron al despacho” de la mandataria, en alusión a los policías que sin autorización revisaron documentación en su oficina, y “algunas advertencias antes de la triple fuga” de los condenados por el triple crimen de General Rodríguez.

“Así como el cartucho de ayer y los llamados, todo va en la misma línea”, resumió.

Ferrari lo relacionó “con la decisión de la gobernadora de luchar contra la corrupción y las mafias. Hay que vincular todo, si no parecen hechos aislados y no lo son”.

En tanto, Diego, el trabajador de seguridad privada que encontró el cartucho, contó que el hallazgo se produjo “ayer a las ocho (20 horas), cuando fui a hacer la recorrida habitual”.

“Abrí la garita a las 8, como todos los días, hice la recorrida de siempre y cuando alumbré con la linterna la casa (de Vidal) del lado de adentro, había un cartucho de escopeta”, dijo y graficó: “Está la reja, y dos metros para adentro estaba el cartucho”.

“Imposible que se le haya caído a algún policía. Y eso fue ayer, porque antes de ayer no estaba. Era un cartucho color rojo, creo que de escopeta 16”, agregó.

Cuando le preguntaron por los ‘dos policías de consigna’ que prestan servicio en la vivienda de la gobernadora, Diego respondió: “No estaban, creo que se habían ido a cargar combustible y al baño, con lo cual pasó alguien antes de las 8 de la noche”.