La misma cueva, el mismo amor

Claudio Penso, especialista en impulsar procesos de cambio y crecimiento.

Avanos es un pequeño pueblo en las cercanías de Cappadocia. Todavía regido por antiguas costumbres musulmanas, el invierno es muy crudo y castiga con -20°, así como el verano con 45°. Allí hay una fábrica especial, funciona en una cueva de 4500 metros de extensión a temperatura constante de 15°. En ese lugar la familia Sultans, desde hace 7 generaciones, produce orfebrería con los mismos métodos de sus ancestros.

 

El arte de los hititas tiene 4000 años, se despliega en copas, platos decorados con colores intensos y escenas vívidas. Un universo de objetos maravillosos hechos a mano y pintados delicadamente durante muchos días conforma la producción de esta familia, célebre en todo el mundo. Trabajan 30 personas que ingresaron orgullosamente a los 10 años y aprendieron el oficio de sus padres, tíos y abuelos. Algunos se dedican a las ventas y hablan varios idiomas.
Son anfitriones espectaculares de su historia y de su amor por el arte desde 1762.
Cuando tienen que hablar de su éxito, algunos lo atribuyen a sus diseños, otros a mantener inalterable los métodos de elaboración artesanales. Casi todos coinciden en algo: Sienten amor por los detalles. La cueva tiene una mística que nadie quiere cambiar y todas las personas de la familia tienen en los ojos la alegría y el orgullo por lo que hacen.
Claudio Penso

claudio@claudiopenso.com

 

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