El cuestionado traspaso del Hospital municipal Dr. Eduardo Wilde de Avellaneda a la órbita de la provincia quedará congelado “hasta que se resuelva la cuestión de fondo”. Pese haber obtenido recientemente la sanción de una ordenanza y la firma de un acuerdo con el Ministerio de Salud de la provincia de Buenos Aires, el intendente de Avellaneda, Jorge Ferraresi, no podrá desprenderse del histórico centro de salud. Así lo dictaminó el Juzgado de Garantías Nº 9 Descentralizado Departamental del Polo Judicial de Avellaneda, a cargo del Dr. Luis Silvio Carzoglio, al hacer lugar a una medida cautelar presentada por el ex concejal Alberto ‘Beto’ Silva, en conjunto con trabajadores y vecinos del centro del salud local.
Silva, concejal con mandato cumplido en el período 2007-2011, fue quien patrocinado por los abogados Roberto José Porcel, Andrea Nieco, y Carlos Barone, inició en el 2014 una acción judicial que tuvo ahora un dictamen favorable para los trabajadores del hospital.
“Hay responsables que son los 17 concejales que votaron a favor dando los argumentos más inverosímiles. El intendente se jactó que la provincialización es un hecho y que no se podía hacer nada. Hoy vemos las barbaridades que han hecho, porque se han llevado por delante derechos”, señaló Silva, para luego definir a los empleados del centro de salud como “los protagonistas que lograron revertir estas situación”.

Respecto del fallo, el abogado Roberto Porcel explicó a la prensa que el juez, al “dictar una medida preventorial, suspende la ejecución de los convenios y ordenanzas”, que ordenaban el traspaso.