Muchos pacientes consultan para bajar de peso, la mayoría ha realizado varias dietas previas, ha consultado a varios profesionales, algunos bajan de peso y otros bajan y suben. Cuando se les pregunta cuál es el motivo del aumento de peso, algunos reconocen que es el tipo de comida, la falta de movimiento o no tener más ganas de hacer dietas.

 
¿Cómo sigue un paciente? ¿Cómo retoma una alimentación adecuada o la actividad física? Siempre hay que encontrar un motivo que aliente, que impulse a retomar y continuar. Su salud debe ser su principal objetivo. Se pueden sumar una ropa que se quiera estrenar, mejorar la silueta, el verano que se aproxima, ¡Hay que encontrar motivos! Cambiar hábitos puede ser difícil pero no es imposible.

 
Ser pro-activo es una excelente actitud. Instaure nuevos hábitos como proponer un cambio de alimentación en la familia, encargarse de pasar por la verdulería, preparar o colaborar en la elaboración de las comidas, proponer un menú semanal. Contar con opciones semanales le permite organizarse con las compras y evitar caer siempre en la misma comida. En el trabajo cambiar las facturas por la fruta y yogurt al menos algunos días en la semana.
Buscar grupos para incorporarse en plazas o parques y generar vínculos que alienten próximos encuentros. En la web también puede encontrar videos de ejercicios acordes a la edad.

 
Todos pueden modificar conductas. Comprender que los cambios son parte de un proceso, no de un día para el otro, disminuirá su ansiedad.
Nadie está cautivo de sus hábitos
Un paciente motivado, poniendo esfuerzo y ganas puede sortear las barreras. La motivación constituye un excelente aliado para el cambio.